Exponemos a continuación un breve relato visual de lo acontecido.
A las 8 de la mañana quedábamos estos 6 valientes, (más José Luis que está haciendo la foto), en el Prat del Lobregat, más Juan Pedro, que se uniría más tarde desde Sant Feliu.
El inicio prometía ser tranquilo y placentero... tal vez, por lo bucólico de pedalear junto al río. Pero, pronto, y tal como rezan nuestro cánones, tuvimos la primera avería: Jesús rompió la cadena. Menos mal que vamos muy bien preparados y en un santiamén lo solucionamos.
Pero a partir de Sant Boi nos dimos cuenta, de que el día anterior estuvo lloviendo copiosamente. Lo que convirtió la pista en un infiennno...
Las cadenas saltaban por el barro... la sujeción de las cubiertas
desaparecían... en fin, un desastre.Una imagen vale más que mil palabras:
Decidiendo qué íbamos a hacer...
Cerca de Castellbisbal...
Y, por fin, llegamos a nuestro destino, donde nos amenizó el almuerzo Carmen, una camarera que era todo simpatía. En la foto nos pedía que sacáramos pecho. La única que lo hizo, y sin esfuerzo alguno, fue ella...
Durante el regreso, nuestro héroe de la jornada,
Juan, sufrió una caída al cruzar a gran velocidad, el paso de un arroyo. La caída nos podría haber dado algo más que un susto, pero finalmente, no fue más que eso. En parte, gracias a los cuidados de Juan Carlos... Y es que, como alquien dijo (alquien que no se habría caído nunca, claro) que no hay un buen nassío pa demarrá sin una buena caída...
En fin, un día entretenido y que nos deja un buen recuerdo.
Y este solo es el inicio de la temporada...
Saludos.
Si señor, así se preparan las futuras expediciones.
ResponderEliminar