GRAN TRAVESÍA :

SIURANA-SIURANA 

💢

Fecha: 6 y 7 de octubre de 2021

Datos:

Mejor una imagen que mil palabras:



No, no hay palabras. Este grupo, el ya mítico "Nasíos pa demarrá", de nuevo hace añicos épicas pasadas. Gestas de antaño que se antojaban insuperables, son superadas por otras que dejarían boquiabiertos al mismísimo pelotón del Tour francés.

La singladura objeto de esta narrativa la llevaron a cabo siete héroes cuyos nombres quedarán en los anales de la épica deportiva: Alberto, Ana, Jordi, Lino, Chemita, Segarra y José Luis.

Lo mencionado hasta aquí no puede ser tildado de exageración. Tan solo verles uno se da cuenta que, con esas miradas y esas poses, solo quedan grandes páginas de oro por rellenar.



Sería injusto no hacer mención de tres grandes, David, Alfonso y Manolo, en este caso, senderistas, cuya confluencia en esta ruta con los ciclistas ha sentado un precedente que no debe pasar inadvertido: dos organizaciones deportivas colaborando y participando en el mismo evento: los "Nasíos" y los "Senderista del Puesto de Mando" (felicitamos a quien se le ocurrió tan original nombre para los senderistas del Puesto de Mando).

No fue fácil. Entre roturas de cambios, testarazos al coche de uno, testarazos al coche de otro, que si no me llega el cambio a tiempo, que "silabarbacoaesunaobracomparablealaconstruccióndelaSagrada FamiliayosvaisacomerfinalmenteloquesecomióClavijo"... la salida parecía gafada desde el principio. Pero como no hay obstáculo que no puedan vencer estos hijos del Trueno, pues eso... Siurana nos esperaba.

Unas pinceladas que apuntan a los prolegómenos de la aventura...






Y llegó la hora del pedaleo...





¿Dura?
¡No!... ¡Lo siguiente! Tuvimos que tirar tanto de la bicicleta que acabamos todos con los brazos 6 cms más largos; ¡palabra! Eso la parte no ciclable. La parte ciclable tenía tantos pedruscos sueltos, escalones y baches que cuando llegué a destino y me bajé de la bicicleta me tuvieron que abrazar porque no podía parar de vibrar.



Pero, ¿bonita? Llamar bonita a esa ruta es desmerecerla. Fue preciosa. Las palabras sobran. He aquí unas pequeñas muestras...










Casi tras 5 horas y media después y más de 1000 metros positivos superados llegamos a destino... y a mesa puesta.
La alegría era inmensa... para algunos parece que la alegría rayó en locura...


Pudimos pasear por Siurana, un pueblecito precioso en un enclave de fantasía...






Y pudimos despedir el día desde un balcón natural desde el que disfrutamos de un auténtico espectáculo...


Mientras los niños, mientras, jugaban...



Por la noche, pudimos disfrutar de una cena aderezada por unas disquisiones filosófico-científicas que hicieron honor al famoso aforismo:
"Los hombres sobrios hablan de fútbol, sexo y comida... 
pero cuando han bebido discurren sobre el sentido de la vida y la física cuántica..."





Al día siguiente pudimos visitar una cooperativa del vino (¿de qué si no?) y realizar alguna compra, no sin antes degustar el tremendo vino de la tierra acompañado de un frugal bocadillito,,,
(¿A cuál de los angelitos hará caso Chemita?)


En definitiva, una travesía inolvidable con momentos igualmente inolvidables. 
Los "Nasíos", junto a los "Senderistas" han superado un gran desafío, de nuevo.
Los grandes, son cada vez más grandes...



¡Uy, perdón, me he equivocado de foto...

Quería poner esta como final poético y trascendente...



¡Hasta la próxima hazaña!